Un favor
- Admin
- 15 mar 2018
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Autor: Francisco Cardona Estrada
Te pido que no dejes de latir,
tal vez algún día, si quieres,
pero recuerda,
que nos hemos muerto vivos muchas veces
y aún así la tierra nos ha regresado silenciosos,
más agusanados pero sin dejarnos sin esencia.
No me dejes, ilumina mi llovizna,
sin llegar a la tempestad
toca la esperanza para que
esa musa se cuelgue en mis brazos,
me haga soñar,
y no ponga el candado al afecto,
jala con fuerza mis venas
saca toda la bruma de esas voces,
que hablan desde la orfandad del abismo
para llevar la cuenta de las olas,
ante la guerra, entre mi alma y el amor eterno.
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